arteUna

AlfonsoCastillo

Otto Hahn
París 31 janvier 1994. (extracto)

El arte fotográfico reside, ante todo, en la distancia que el fotográfo toma en relación al sujeto; alrededor del aparato fotográfico, lo real prolifera. Alfonso Castillo, el hombre detrás el objetivo, debe entonces, cortar, encuadrar ...

... Estos elementos abstractos, le permiten demostrarnos lo fugaz, "imprimiendo" una estructura que llena la página ...

... La casualidad entra por una gran parte en la interacción del agua y el fierro. Pero la elección del encuadre pertenece al fotógrafo, quien aisla un espacio en el espectáculo del mundo ...

... Él aborda el mundo de lo inmaterial y de la transparencia. El material sintético capta el sol, elemento esencial para el fotógrafo que gracias a la composición, transforma la luz en una especie de líquido que desliza sobre la superficie de las esculturas. La geometría que domina el trabajo de Kosice sufre entonces, una mutación física, carnal: las curvas se entrecortan como caderas, juegan con las formas sensuales típicamente femeninas. El fotógrafo encuadrando su sujeto, se abre sobre una serie de "metáforas visuales". El pliegue y el envejecimiento del fierro, el reflejo borroso del cielo, la armonía de las líneas forman, los tres elementos del trabajo de Alfonso Castillo. A partir de estas plataformas, minimalistas, el juego sobre todas las gamas de posibilidades fotográficas, desde la imagen en la imagen, hasta la transmutación de la materia. Lo real se disuelve para hacer aparecer una verdad diferente, donde todo es movimiento, al mismo tiempo mancha, impresionista y geométrica. Alfonso Castillo se inscribe asi en la tradición de la fotografía abstracta: Minor White, Edward Weston, Imogen Cunningham, Aaron Siskind, Ralph Gibson. A este tesoro común del museo imaginario de la fotografía, Alfonso Castillo aporta su contribución hecha de observación, aguda y de sensibilidad a flor de piel. El talento de Castillo es de sorprender lo imperceptible y de darle una respiración.

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